skateboarding

El golpe seco de la tabla y su eco crocante contra el cemento forman una dulce melodía que acompaña a los skater en sus intensas jornadas de patinaje.
Las cuatro ruedas del monopatín, ese que fuecreado en 1963 en Malibú, California (Estados Unidos) como un reemplazo de las tablas de surf usadas para sortear las olas, recorren en sus mejoradas versiones las distintas calles de la ciudadpanameña y se inmiscuyen también en las principales plazas de las provincias.
Los seguidores del denominado skateboarding se suman a una corriente en donde la adrenalina, el peligro y la acción son lamotivación primaria.
El movimiento no cuenta con una única agrupación. Son jóvenes, en su mayoría de entre 15 y 25 años, que se congregan en torno a sitios que dispongan de barandas metálicas, escalerasempinadas o aceras oblicuas que sirvan como rampas para practicar el deporte extremo que alguna vez perteneció al mar y que representa con cada estructura un nuevo reto por superar para quienes siguenla filosofía del skater.
En el gremio se mantienen activos también los “veteranos”, aquellos que rondan los 40 años, quienes con hijos y negocios que atender se declaran fanáticos de las cuatro ruedasy maniobran con ágiles pies las tablas en sus ratos de esparcimiento.
En Panamá este deporte fue instaurado en la década de 1970 cuando sus fibras penetraron entre la juventud zoneíta (residentes dela Zona del Canal), y cobró en los nacionales mayor relevancia en la década de 1980.
Ahora Mirlo Vardic, uno de sus promotores, reconoce el resurgimiento del movimiento skater.



La sensaciónsublime de la libertad es el motor para Harold Tomlinson, quien ha remado con sus manos el aire mientras ha estado en su patineta desde que se interesó por ella a sus 16 años.
Sus pies han pisado lasuperficie arenosa de al menos nueve patinetas al año, dice este ganador en 2004 del RedBull Local Hero, con 33 años.
Tomlinson, con su estilo rasta y su patineta a la espalda, ha logrado más de un...