Palacio
El edificio, tanto dentro como afuera, es a todas luces decorte colonial; patio interno, crujías, árboles que dan buena sombra, aljibe, columnas con arcos de medio punto, muchos aposentos y piso superior. Hasta allí vas bien, sabes donde te metiste. Son losrecintos los que te paran los pelos de punta cuando entras y vez los aparatos de torturas inimaginables que allí exhiben. Te paran los pelos de punta.
Aquello debió ser un lugar tenebroso aúncuando hoy esta iluminado. Y me imaginé, estando en aquellos recintos, los aullidos dolorosos que debieron quedarse en las gruesas paredes buscando alivio que solo obtenían confesando algún delito queatentara contra el Santo Oficio. Y debí haber dado en el clavo cuando pregunte por mera curiosidad sobre una ventanuca sellada (que supe después daba a la calle). Y cual fue mi sorpresa, "por allímetían las denuncias de Brujas y herejes" me revelo el guía como si hubiera destapado una maldición.
Los aparatos que vi allí adentro me dejaron tumefacto. Y aún más, las 25 preguntas quele hacían a los brujos o herejes. La pregunta que me dio pavor fue ¿qué comían Ud. y el Diablo cuando se juntaban? Y hay que ver los aparatos de torturas; el Potro, el Cordel (te estiran los miembrosa punta de soga), el Jarro de Agua (te meten un trapo hasta el fondo de la garganta y luego con un gran embudo que te meten hasta la garganta te vacían un jarro completo de agua), la Garrucha(realmente doloroso), el Aplasta Pulgas o elAplasta Cabezas, el Penitente.
En un lúgubre aposento pesaban a las sospechosas (el Cuarto del Peso de las Brujas) y si pesaba menos -según estatura- era...
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