Manuel Avila Camacho
(1897-1955; presidente de México 1940-1946) |
Si en el último tramo el régimen cardenista fue menos radical, esa moderación se acentuó al elegir como sucesor a Manuel Ávila Camacho, conocido como el "presidente caballero" por su carácter conciliador y maneras suaves. Llegó al poder tras derrotar al candidato opositor Juan A. Almazán, del grupo obregonista, quien calificólas elecciones de fraudulentas, aunque posteriormente las aceptó. Ávila Camacho se apresuró a marcar distancia con la administración previa y llamó a la reconciliación y a la “unidad nacional”, lo que justificó en vista del difícil entorno por la Segunda Guerra Mundial declarada en 1939. Había que estrechar vínculos al interior del país y el mandatario lo sabía. Así, se hizo acompañar en ciertaocasión por todos los ex presidentes que en ese entonces aún vivían. También era importante dar por terminados los enfrentamientos con la Iglesia y para ello públicamente se declaró creyente. Iba atando cabos sueltos. Eliminó de la ley determinados conceptos que producían escozor entre los conservadores; en el ámbito educativo fue notoria la labor de alfabetización realizada por el secretario deEducación Jaime Torres Bodet. | |
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Pero la llamada unidad nacional en realidad se tradujo en quietismo social. Se disminuyó al mínimo posible la reforma agraria y se debilitó el movimiento obrero. El capital extranjero, ligado más que nunca con el capital nacional, se dejó sentir otra vez poderoso e incontenible. Sin embargo, el régimen de Ávila Camacho no fue del todo ajeno a la revolución ysu ideología, ya que adoptó una parte de la doctrina y la puso en práctica, la del objetivo capitalista, aún cuando deprimiera otra, la de la justicia social. Con Ávila Camacho se inician propiamente los regímenes civiles, dejando en el pasado la influencia decisiva de los militares; su periodo se caracteriza por una notable estabilidad política y como consecuencia de la guerra mundial, comienzaun veloz crecimiento y diversificación de la economía. La economía crece en un 38 por ciento. El resto del mundo se convulsionaba con el conflicto bélico. Al principio de la Segunda Guerra Mundial, México se declaró neutral, pero esa postura se complicó cuando Estados Unidos, después del ataque japonés a Pearl Harbor en diciembre de 1941, declaró la guerra a Alemania, Italia y Japón. Medio añodespués nuestro país sufrió la pérdida de dos buques petroleros por los ataques de submarinos alemanes, y entró al conflicto sumándose a los aliados (Gran Bretaña, Estados Unidos, Francia y la URSS). Fue entonces cuando se impuso el servicio militar obligatorio. A diferencia de las naciones que sufrieron directamente los efectos de la guerra, para México el impacto fue más bien favorable. La economíarecibió un fuerte estímulo debido a la llegada de capital extranjero y con ello la posibilidad de emprender nuevos negocios. Los esfuerzos por industrializar al país iniciados diez años antes se fortalecieron con la demanda interna y externa de productos. Se vivía una verdadera euforia entre algunos grupos privados. Si a causa de la guerra era difícil adquirir ciertas mercancías del exterior,empresarios y autoridades del gobierno unieron esfuerzos para fabricarlas en el país. Esta estrategia de industrialización, conocida como “sustitución de importaciones”, fue reforzada más adelante con impuestos que protegían a los productores nacionales de la competencia internacional. Otra gran ventaja fue que la Guerra Mundial obligó a Estados Unidos a mejorar las relaciones con sus vecinoslatinoamericanos, así México y aquél país alcanzaron acuerdos en materia de deuda, comercio, migración, aguas, asistencia técnica y la cuestión petrolera derivada de la expropiación de 1938. En los acuerdos destacó la reducción de la deuda en un 90 por ciento. La administración de Ávila Camacho iba sumando puntos favorables en una época difícil a nivel mundial. Si al auge de la economía se suma la...
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