Los Diez Libros de la Arquitectura - Libro III
Libro III
Introducción:
Apolo de Delfos manifestó que Sócrates era el más sabio de todos los hombres; afirmaba que era muy conveniente que el hombre tuviera el corazón abierto de par en par, para no ocultar sus pensamientos y sentimientos sino estar expuestos a todo el mundo. Mirón, Policleto, Fidias, Lisipo, entre otros, alcanzaron la gloria gracias a sushabilidad artísticas y lograron la fama porque sus trabajos eran destinados a reyes, nobles ciudadanos o a importantes ciudades. No obstante, muchos otros artistas como el atemense Hegias, Quión de Corinto, Miagro de Focea, Farax de Éfeso y Boedas de Bizancio que eran igual de talentosos no recibieron el mismo reconocimiento ya bien sea por la escasez de patrimonio familiar o mala suerte. Debe sermotivo de indignación el que permanezca en la oscuridad los meritos de su producción artística por falta de una justa valoración de sus obras. Mas que todo cuando observamos que en actos sociales se desvirtúa su justa consideración con falso asentimientos. Por lo tanto, como Sócrates si los sentimientos, opiniones y conocimientos científicos se hicieran prosperan mediante enseñanzas prácticas, seríanclaros y transparentes y no prevalecería ni la influencia ni la parcialidad y algunos alcanzarían la cima mediante verdaderos esfuerzos.
Capitulo Primero
Origen de las Medidas de los templos:
La disposición de los templos depende de la simetría, cuyas normas deben ser observadas cuidadosamente por los arquitectos, La simetría tiene su origen en la proporción y la proporción se define como laconveniencia de un modulo constante y calculado. Es imposible que un templo posea una correcta disposición si carece de proporción y simetría como sucede con el cuerpo de un hombre bien formado. El cuerpo humano fue formado por la naturaleza de manera que el rostro desde la barbilla hasta la frente, donde estas las raíces del pelo, mida una decima parte de su altura total y así sucede con los otrosmiembros del cuerpo manteniendo una simetría de la que muchos antiguos pintores y escultores famosos se sirvieron. Igualmente las partes de los templos deben guardar una simetría simetría perfectamente apropiada a ellas respecto al conjunto total de su perfecta dimensión. Si la naturaleza ha formado el cuerpo humano de modo que sus miembros guardan una exacta proporción respecto a todo elcuerpo, los antiguos fijaron esto en la realización de sus obras, donde cada una de sus partes es proporcional con respecto a la forma total de sus obras.
Dejaron constancia de la proporción de sus medidas en todas sus obras pero sobre todo en la construcción de los templos de los Dioses.
Igualmente, a partir de otros miembros del cuerpo humano, concluyeron el cálculo de las distintas medidas que sonnecesarias en cualquier construcción. Los autores antiguos fijaron que el número perfecto era el número diez, ya que ese es el número de dedos de la mano; por otro lado, los matemáticos afirmaron que el número perfecto es el número seis ya que el pie es la sexta parte de la altura del hombre y si sumamos seis veces el pie delimitaremos la altura del cuerpo, pero después decidieron sumar estos dosnúmero perfectos obteniendo así un nuevo número perfectísimo, el dieciséis. El número fue descubierto a partir de las articulaciones del cuerpo y miembros estableciéndose así una proporción; entonces al construir los templos de los Dioses inmortales ordenaron las partes de sus obras con el fin de que, por separado y en su conjunto, resultaran armónicas, en base a su proporción y simetría.
Capitulosegundo
Estructura de los Templos:
Las principales estructuras de los templos de las que derivan su aspecto o figura exterior son: El templo In Antis, Próstilo, Anfipróstilo, Períptero, Pseudodíptero, Hípetro.
Será un templo “In Antis” cuando en la fachada posea unas pilastras que delimiten las paredes que rodean el santuario y entre las pilastras se levante dos columnas. El templo “Próstilo”,...
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