Libros
Quizás algún lector pueda pensar que me equivoqué al escribir el título de este artículo, pero no lo hice; así que no se detenga a pensar lo contrario, y siga leyendo.
Mi oración esque al final de la lectura, Usted pueda reconocer que no fue en vano que Dios me despertara a las 5:30 de la mañana para escribirlo.
Asimismo, Usted también agradecerá a Dios como yo siempre lo hehecho que la originalidad del título que vino a mi mente en esta oportunidad como en otras tantas, es un don del Espíritu Santo y no un producto de mi imaginación por ser un consumidor ávido de unelixir llamado café.
Un día antes, mi corazón se había entristecido al leer la noticia del fallecimiento de Judy Trunnell, una maestra de solamente 33 años de edad que enseñaba en una escuela para niñosdiscapacitados en la ciudad de Harlingen, Texas y que acababa de dar a luz a una niña.
Aunque Judy ya venía padeciendo de algunos problemas de salud, éstos se agravaron en las últimas dos semanas desu vida como producto de los efectos de la gripe porcina, clasificada en la profesión de la medicina como la gripe por A o H1N1.
La Organización Mundial de la Salud (O.M.S.) define a la gripe por Ao H1N1 como una “infección respiratoria aguda y muy contagiosa de los cerdos, causada por alguno de los varios virus gripales de tipo A de esa especie. La morbilidad suele ser alta, y la mortalidadbaja (1% – 4%). El resultado puede ser un virus gripal con genes de diversa procedencia, lo que se llama un virus reagrupado. Aunque los virus de la gripe porcina son normalmente específicos de esaespecie, en ocasiones saltan la barrera interespecies y provocan la enfermedad del hombre. En general los síntomas clínicos son similares a los de la gripe estacional, pero las manifestaciones clínicasson muy variables, desde una infección asintomática hasta una neumonía grave que mata al paciente.”
La misma organización también advierte que: “El impacto de una pandemia causada por un virus de...
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