La visad.f,mgn

Bitácora del segundo día: Llevo prácticamente paseando desde ayer, nadie ha notado mi ausencia, pareciera que todo está normal y calmado. Llevo caminando mucho tiempo, y lo único que he podido veres falsedad. Muchas veces me preguntaba si de verdad yo encajaba en este mundo, en donde el dinero podía hacer y deshacer todo. ¿Si me importaba todo eso? No, jamás había sido una chica material,parecía que todos mis primos vivían por y para el dinero. Hasta mi madre parecía normal junto a las personas con las que estaba destinada a convivir. ¿Cuándo seria el día en el que por fin tomaríamis propias decisiones?
Mi única amiga decente parecía ser mi guitarra, quien me acompañaba a todos lados, cuando tocaba podía sentirme en una extraña unión con ella, como si no necesitara de nadie yla música fuera capaz de transportarme a otros lugares lejos de este lugar. La gente abundaba en este tipo de ciudades pero ni una parecía ser mi agrado, quizás la apariencia que tenía no ayudabamucho, pero de igual manera, yo era de esas personas cerradas, con un brillo de malicia en la mirada. –Gracias padres, por enviarme al infierno al que mi padre llamaba hogar.-Masculle en tono bajohaciendo una mueca con mis labios.
Aunque diera la imagen de una chica tonta, no lo era, tenía el oscuro secreto que mis padres me había mandado a estudiar medicina porque mi papa vio dotes en mí.Hace dos años la universidad paso a ser solamente un triste recuerdo de mi pasado. Los únicos que sabían de aquello eran mi madre, mi padre y mis tíos a quienes ayudaba constantemente para cuidarse,su casa era muy distinta a esta, ellos si tenían “el calor de hogar” que tanto se busca. Por las mañanas podías oler el puro mezclado con el aroma del café recién hecho.
Continuaba caminando y elcigarrillo se estaba acabando, era un tanto costoso tener este tipo de adicciones, pero tenia que vivir con ella para toda la vida. Por suerte, el dinero jamas me faltaba, podía pasar horas tocando...