Goya
En 1808, la invasión de España por las tropas napoleónicas colocó al artista en una situación delicada, ya que mantuvo supuesto de pintor de corte con José Bonaparte. Pese a todo, no se privó de plasmar los horrores de la guerra en obras comoEl 2 de mayo y Los fusilamientos del 3 de mayo, que reflejan los dramáticosacontecimientos de aquellas fechas en Madrid. Además, en los sesenta y seis grabados de Los desastres de la guerra (1810-1814), dio testimonio de las atrocidades cometidas por los dos bandos y acentuóvisualmente la crueldad de la guerra como protesta contra ella lanzada a la posteridad desde la impotencia.
Por haber trabajado para José Bonaparte, el artista cayó en desgracia tras la restauración deFernando VII, y en 1815 se retiró de la vida pública. En 1819 experimentó una recaída en la misteriosa enfermedad que en 1792 lo había dejado completamente sordo. Ello, unido a su nueva vida ensoledad en la Quinta del Sordo, casa solariega que había comprado poco antes, debió de contribuir a la exacerbación imaginativa de que el artista dio muestras en la decoración de su nueva vivienda: catorcemurales de gran tamaño con predominio de los tonos marrones, grises y negros, sobre temas macabros y terroríficos.
Estas obras, conocidas en la actualidad como Pinturas negras, han contribuido con elpaso de los años a la consolidación del reconocimiento del genio de Goya, tanto por su originalidad temática como por su técnica pictórica de pincelada amplia y suelta. El pintor se trasladó en...
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