Gandi
Leyenda del tesoro del Choqueyapu
Versión reescrita por N. Brachet, sobre la base del libro "Leyendas de mi tierra"
de Antonio Diaz Villamil(Libreria - Editorial "Juventud")
Un anciano ermitaño vive solo con su perro en la motaña no muy lejos de un pueblo al que se dirige de vez en cuando para renovar su stock de víveres y de ropa. El hombrees poco hablador, y nadie sabe realmente quien es. Todo lo que se cuenta envidiosamente de es que ese viejo loco es probablemente un minero increíblemente afortunado al ver brillantes pepitas de oroque saca de su bolsillo para pagar sus compras. Los habitantes del pueblo envidiosos de tal riqueza, han muchas veces buscado penetrar los secretos del tesoro de ermitaño. Pero en vano. El hombre esmuy prudente, y con su viejo fusil y su fiel perro de guardia, cuida a que cada uno de esos codiciosos espiones no se acerquen a su propiedad.
Un día, las visitas al pueblo del ermitaño cesan. Es superro quien se presenta a los aldeanos con una lista de compras de medicamentos prescrita por su amo y acompañado de pepitas de oro. La novedad de una gran enfermedad del viejo hombre se difunderápidamente, y todo el mundo se precipita, armas en la mano, hacia la morada del ermitaño con la esperanza de pillar su tesoro.
Dos adolescentes del pueblo aprenden a vivir solos después de la muerte trágicade sus padres enfermos. Los huérfanos viven en una extrema pobreza y tratan de sobrevivir como pueden, en la indiferencia total del resto de la comunidad. Ellos se enteran con tristeza de laenfermedad del ermitaño, que les recuerda a sus padres que les habían dado su amor, su salud y su vida para ofrecerles toda la felicidad posible. Los dos huérfanos deciden entonces vender uno de sus rarosbienes para comprar un cántaro de leche fresca que ellos llevaran al viejo ermitaño.
Los aldeanos encuentran al ermitaño con fiebre tendido en su cama, su perro fiel acostado a sus pies. Ninguno...
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