Ensayo De La Película Sacco y Vanzetti

¿Existe la igualdad de justicia ante la ley?

“Se piensa que lo justo es lo igual, y así es; pero no para todos, sino para los iguales. Se piensa por el contrario que lo justo es lo desigual, y así es; pero no para todos, sino para los desiguales” .

Ferdinando Nicola Sacco y Bartolomeo Vanzetti eran dos inmigrantes italianos, trabajadores y anarquistas, que fueronjuzgados, sentenciados y ejecutados vía electrocución en el año 1927 en Massachusetts, por el robo armado y asesinato de dos personas en 1920 en South Braintree, Massachusetts, la injusticia tuvo grandes repercusiones.
Ambos son detenidos en 1920 en el ámbito de una operación de “normal represión” contra los inmigrantes radicales, todo esto coincide con el Red Scare (Terror Rojo), uno de losperíodos de represión no sólo ideológica más intensos de la historia americana.
A partir de entonces se desarrolla un juicio plagado de groseras violaciones de la ley, falsos testigos y pruebas construidas bajo la dirección del fiscal y con la voluntaria complicidad del juez y del Gobernador de Massachusetts.
La detención, juicio y condena de Sacco y Vanzetti, dejó aldescubierto los prejuicios y el racismo de la sociedad norteamericana contra los inmigrantes y los militantes de izquierda.
Hablar de Sacco y Vanzetti inevitablemente remueve asuntos que nos perturban hoy: la relación entre la guerra y las libertades civiles, las ideas del anarquismo, la obliteración de las fronteras nacionales y como tal de la guerra, la eliminación de la pobreza, lacreación de una democracia plena y lo más preocupante de todo, nuestro sistema de justicia.
Esos dos hombres, el vendedor de pescado y el zapatero, no lograron obtener justicia en el sistema estadounidense, porque la justicia no se imparte igual para el pobre que para el rico, para el oriundo que para el nacido en otros países, para el ortodoxo que para el radical, para el blanco o la personade color, y aunque la injusticia se juegue hoy de maneras más sutiles y de modos más intrincados que en las crudas circunstancias que rodearon el caso de Sacco y Vanzetti, su esencia permanece.
En su proceso la inequidad fue flagrante.
Se les acusaba de robo y asesinato, pero en la cabeza y en la conducta del fiscal acusador, del juez y del jurado, lo importante de ambos era,que eran “italos mugrosos” , extranjeros, trabajadores pobres y radicales. Un ejemplo de ello es en el interrogatorio a Sacco cuando recién lo detienen, en donde las preguntas del policía se limitaban a saber si era ciudadano, comunista, anarquista y si creía en el gobierno estadounidense, ¿qué tenían que ver estas preguntas con el robo de una fábrica de zapatos en South Braintree, Massachusetts,y con los disparos que recibieron el pagador de la fábrica y un guardia?. Sacco mintió en sus respuestas, por supuesto, pero ¿por qué le mintió a la policía?, porque siendo extranjero y anarquista, sabía que para el no existe la justicia. Y así es como sucede en muchas partes del mundo, llevados por razones tanto políticas como de racismo y por diferencias de clases, la de los oprimidos y la delos ricos: “Sé que la sentencia será entre dos clases, la de los oprimidos y la de los ricos… Es por eso que estoy aquí ahora, en el banquillo de los acusados, por pertenecer a la clase de los oprimidos” .
Este caso revela, en los más descarnados términos, que las nobles palabras inscritas en los frontispicios de nuestras cortes “igualdad de justicia ante la ley”, siempre han sido unamentira.
La justicia es ética, equidad y honestidad. Es la voluntad constante de dar a cada uno lo que es suyo. Es aquel referente de rectitud que gobierna la conducta y nos constriñe a respetar los derechos de los demás.
Todas las virtudes están comprendidas en la justicia. En definitiva, la verdadera justicia es el arte de dar a cada uno lo suyo, o bien, hacer a un...