Educándonos para educar: el profesor y los valores

Cada vez vemos más distante aquella época en la que los maestros eran los totales “portadores del conocimiento” . A la labor del docente se le han sumado otras tareas que “sobrepasan en mucho lafunción tradicional de transmisor de conocimientos por medio de la exposición y reproductor de conocimientos generado por otros” (Bellido 2009:47). De acuerdo con Sacristán es su deber también “promoveraprendizajes de tipo ético y social” (Citado en Bellido 2009:47), dicho en otras palabras, en promover la formación de valores, actitudes y hábitos positivos. Se plantea entonces una visión holísticade la educación formal que equipare la enseñanza de dichos elementos con los del conocimiento. Esos elementos aunque no se distinguen en el currículum en una dimensión formal, sí se aluden en elcurrículum oculto como elementos no explícitos. La pegunta que como docentes deberíamos hacernos de acuerdo con Romero es “¿Cómo transmitimos y formamos esos valores?” (Citado en Bellido 2009:88)Anteriormente la formación de valores se consideraba labor de la familia. Sin embargo, la educación se refiere a un proceso constante y complejo que va mas allá del hogar o el aula. En este sentido estoytotalmente de acuerdo con la visión de Romero quien señala la importancia de los medios como “una clave importante en la formación de valores” (citado en Bellido 2009:88). Son varios los elementos queservirán al joven , hablando de formación universitaria, para concretar su escala de valores e interiorizarla. Aún cuando esto presupone una limitante para el maestro de educar adecuadamente en esa áreaa sus alumnos dado el degenere de nuestra sociedad, me parece que debemos mirar con responsabilidad la tarea que nos atañe desde la perspectiva de Angélica Espinosa, una responsabilidad moral.Garrido propone la “ejemplaridad” como uno de los factores que resultarán un una enseñanza efectiva. Hablando de valores, éste es un punto que quisiera enfatizar, ya que me parece especialmente...