Demanda
Hace mucho tiempo existió una posada llamada "La Estrella de Plata", cada día con menos clientela.
El dueño había hecho lo mejor que podía por tenerla bien y satisfacer a los clientes y, al fin, fue a consultar a un sabio.
Este, después de escuchar sus lamentos le dijo que lo único que debía hacer era cambiar el nombre de la posada.
El sabio lo convenció y le dijoque la bautizara "Las cinco campanas" y colocara seis campanas encima del letrero. ¿Seis campanas? Eso es absurdo, le dijo el posadero.
-Inténtalo y verás el resultado, respondió el sabio sonriendo.
Así lo hizo el posadero y sucedió que la gente que pasaba por el lugar entraba para advertir acerca del error.
Una vez adentro quedaban impresionados por la cordialidad y el buen servicio yla posada permanecía llena.
Nota: Pocas cosas satisfacen más nuestro ego que corregir los errores de los demás
Los WEMMICKS eran gente pequeña hechas de madera. Todos estaban tallados por un artesano llamado Elí. Su taller formaba parte de una colina con vista a la villa.
Cada "wemmick" era diferente. Unos tenían grandes narices, otros grandes ojos. Algunos eran altos y otros bajitos.Algunos usaban sombreros, otros abrigos. Pero todos estaban construidos por el mismo artesano y vivían en una preciosa villa.
Y todos los días, cada día, los "wemmicks" realizaban la misma tarea: Ellos se regalaban etiquetas unos a otros. Cada "wemmick" tenía una caja de etiquetas de estrellas doradas y una caja de etiquetas de puntos grises. Al subir y bajar las calles de la preciosa villa, lagente empleaba su tiempo en pegarse etiquetas de doradas estrellas o de puntos grises, unos a otros.
Los más hermosos aquellos construidos con maderas pulidas y hermosos colores, siem pre obtenían estrellas. Pero si la madera estaba áspera o la pintura desconchada, los "wemmicks" pegaban etiquetas grises sobre ellas. También los talentos obtenían estrellas.
Algunos podían levantar grandesgarrotes sobre sus cabezas o saltar sobre cajas altísimas. Aún otros sabían decir bellas palabras o podían cantar canciones hermosas. Todos el mundo les otorgaba estrellas. Algunos "wemmicks" estaban totalmente cubiertos de estrellas. Cada vez que ellos obtenían una estrella, ¡los hacía sentirse tan bien! Esto los impulsaba a querer hacer algo más para alcanzar otra estrella.
Sin embargo, otros,hacían cositas. Y obtenían puntos grises.
Punchinello era uno de esos. Él trataba de saltar alto como los demás, pero siempre se caía. Y cuando caía, los demás hacían una rueda alrededor de él y le daban puntos grises.
Después de un tiempo, Punchinello tuvo tantos puntos grises feos que no quería salir a la calle. Tenía mucho miedo de hacer algo estúpido como olvidar su sombrero y caminar en elagua, y que la gente le volviera a dar otro punto. La verdad es que tenía tal cantidad de puntos grises sobre él, que cualquiera se le acercaría y le añadiría uno más hasta por gusto. "Él merece montones de puntos", comentaba la gente de madera, de acuerdo a unos con otros. "Él no es una buena persona de madera."
Después de un tiempo, Punchinello creyó lo que decían sus vecinos. "Yo no soy unbuen 'wemmick', decía. En poco tiempo, él salió a la calle y empezó a relacionarse con otros "wemmicks" que tenían un montón de puntos grises. Él se sintió mejor alrededor de ellos.
Un día, él se encontró una "wemmick" que era diferente a cualquiera de las que siempre había conocido. No tenía ni puntos ni estrellas. Era puramente madera. Se llamaba Lucía.
Esto no se debía a que sus vecinos notrataran de pegarle sus correspondientes etiquetas; sino a que las etiquetas no se pegaban a su madera.
Algunos de los "wemmicks" admiraban a Lucía por no tener puntos, de modo que corrían hacia ella y le daban una estrella. Pero la etiqueta se despegaba. Otros no la tenían en cuenta al ver que ella no tenía estrellas, y le daban un punto. Pero tanto la estrella como el punto se despegaban....
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