Jaime Garzon

Truman Capote es capaz de hablar de todo, hasta del detalle que nadie tendría en cuenta, pero con una rigurosidad en su lenguaje y una transparencia en la descripción que hace que el lector se sientadentro de la historia, viviendo con él ese momento. Y son esas pequeñas cosas y esa sencillez en sus palabras lo que hace los relatos del genial Capote tan atractivos, ligeros, fáciles para elreceptor, pero a la vez intrigantes, enganchando tanto como la heroína.
Ataudes en miniatura tallados a mano con la foto del que será la víctima de un enfermo obsesivo; decenas de gatos muertos dentro delcongelador de una adorable ancianita; un hombre ciego y paraplégico que una mañana desaparece sin dejar rastro; la obsesión de un cincuentón por una niña y el mensaje en una botella; una conversacióncon Norma Jean Baker sin el brillo de Marilyn Monroe; y hasta un Truman Capote que se desnuda ante sus lectores confesándose alcohólico, drogadicto, homosexual y un genio. Estos son algunos de loscatorce artículos periodísticos recopilados en el libro Música para camaleones, un librodonde Truman cuenta historias, unas reales y otras no, mostrándolas tal cual, sin florituras ni opiniones, para queel lector pueda crear su propio juicio. Desde relatos cortos hasta conversaciones reproducidas al detalle nos sitúan en los años de la niñez de Truman hasta sus cincuenta y tantos años, retratándofielmente la sociedad del momento.
Música para camaleones comienza con un breve resumen de la vida de TrumanCapote en su faceta de escritor, relatado por él mismo. Cómo ha ido evolucionando su estilocon el paso de los años hasta llegar a la creación de estelibro. Él define su estilo de esta manera:
“Creo que la mayoría de los escritores, incluso de los mejores, son recargados. Yo prefieroaligerar, la noción sencilla, clara, como arroyo del camp
Música para camaleones un libro que Truman Capote presenta como una obra de literatura documental, bucea con implacable lucidez en la poesía y el...